Sunday, April 09, 2006

Rehabilitación

Quizás conforme pasa el tiempo, a medida que la adultez deja de ser la nunca bien ponderada invitada de piedra y comienza a quedarse-como-en-casa, los chasquidos de dedos ya no bastan, ya no nos conforman, y a lo mejor empezamos a necesitar un poco más...

Es extraña esta libertad, tantas veces agobiada, y muchas veces malgastada.
Hoy se queda.

1+1 = A dos pasos, años luz de casa...

Sobre el tiempo...
"Siguen pasando horas como trenes
en esta soledad que te promete
rescatarte con armas de canción"
(O. Lazo)

... y el olvido...
"Después de ti, después de mi,
después de amar a no poder,
sentimos frío el escenario..."
(A. Filio)

...y la libertad...
"Desde aquí puedo ver todos los escenarios
por donde me han llevado el fracaso y tu nombre [...]
Por lo menos asume tu vuelo
y que vas en picada en el aire gris,
que tu futuro inmediato es el suelo,
que de tanto buscar se te olvidó vivir"
(O. Lazo)

Mi mayor pecado es no acabar con las palabras
parafraseando canciones para morir

Thursday, April 06, 2006

Pensamientos de metro

I
De mi pensamiento tu nombre repicando,
de mi garganta tu sinsabor acostumbrado

Algo que te saque de mis manos pegajosas
delirantes de las tuyas,
algo que te borre de mi estómago quejoso,
que no deja de llamarte en la mañana...
Algo que te devuelva a tu origen
cuando sólo el caminante de mis anhelos renunciados
te veía aún por este cristal añejo
al que suelo llamar
deseo...

II
La señora antigua se toma el pelo de la memoria
se lo toma y lo atraganta con solipsismos baratos
mientras yo sigo mirando por la ventana
caerse los segundos de otoño

III
Buenas noches los pastores, dijo la oveja,
y cargó su sentencia de muerte toda la vida

IV
¿Cuando te cansarás de atrapar mi sueño?
¿Cuando dejarás de ser mi pensamiento recurrente?
La señora antigua mira la puerta cerrarse
con los ojos cerrados.

Mi café se revuelve solo mientras espera en casa
a que llegue esta nueva tarde
a recortar tu instante.

¿Y para qué?
Para que mientras tanto,
mientras todo pasa, llenándose de tic-tac(s)
y en cámara lenta,
yo siga pensando en eso que suelo llamar
deseo...



"Ubicar mi pensamiento en un naufragio
no me ha sido nada fácil si lo pienso,
hay un día de entre tanto que contemplas,
hay un sueño por soñar que luego inventas,
hay un tiempo largo y terco que presiento.
Sólo el sol habrá venido cuando quiera yo que venga el agua,
cuando todo manifieste su sabor de espuma,
cuando luego de una bruma no haya nada.
Y al final sólo el sosiego con su manto cubrirá mi casa,
pasará por mi ventana, me dirá tu nombre,
y ya después de todo el tiempo no sabré de nada, de nada...
Sólo sé que no fui yo el de la agonía,
y las nubes se pasaron a otros cielos,
pero aquello nos sirvió, y se fue tu cercanía que yo espero.
Sólo sé que quién soñó la fantasía
se quedó con sus momentos olvidados,
y en lugar de un gran dolor, se enfrentó con la incerteza del pasado...."
(Manuel Huerta)

PD: ¿Alguien conoce pastillitas para dejar de sentir? O en su defecto, ¿de pensar?
¡Pago con el alma!

Wednesday, April 05, 2006

De cómo revivió cacharrito...

El otro día una máquina de esas refrigeradoras donde mágicamente uno echa monedas y sale por abajito un apetitoso refresco, me premió. Inserté, como buena samaritana (cada uno inserta como puede), 2 monedas de $100, 1 moneda de $50, y 10 monedas de $10, y, sorpresa la mía... Obtuvé DOS latas! Una coca-cola, y una coca-light.

Entonces pensé:
1) "Quizás en este mismo momento, en cualquier otro lugar del mundo, hay algún bruto enchuchado pateando una máquina de latas, y siendo detenido por los pacos "por desórdenes!"
2) "Quizás, justo después de mí, pasará por esa misma máquina el hombre de mi vida, destinado a encontrarse conmigo ese día en ese mall, pero que (mala cueva dijo el conejo), debido a una micro-carretilla, no llegó a destino, y pocos minutos después de mí sufrirá mi partida por la ausencia de una lata bajo la máquina, y el alegato por los $350 perdidos"
3) "Quizás coca-cola y coca-light son pareja hace un par de horas, se acaban de dar cuenta que son el uno para el otro y no soportaron la idea de separarse luego de la desafortunada elección de un bebestible por esta estúpida joven inconciente"

Así que bebí ambas bebidas, alternadamente, mientras esperaba desesperanzada que alguien me ayudara a empujar a cacharrito que se acababa de quedar en pana en el estacionamiento del Parque Arauco. Un trago de coca-cola, un trago de coca-light.
Y así poco a poco fui asesinando a la pareja emergente.
Así, trago a trago, esperé hasta que llegó un fornido guardia que me ayudó a empujar a cacharrito, con el corazón en la mano, y la frente sudando, lo más aprecido a una salvación boca a boca.

Hoy coca-cola y coca-light yacen en algún rincón de la ciudad, en un basurero, juntos, siempre juntos, en cuerpo y lata.