Yo ya sabía...

Tengo ganas de decirte

que ya no tengo nada más que decir.

Que las respuestas llegaron solas

que se acabó la discusión.

Que estuvo rico,

que me gusta verte de vez en cuando

que me basta tu beso a fecha.

Que así es la vida

que para qué seguir pensando el futuro

Que esta es mi vida

y que no te la regalo.

Que no te preocupes

que yo ya sabía

que la vida es incierta

y nadie sabe lo que nos espera.

Que mañana no vengas

que quiero estar sola

Y que no es mentira

es profunda certeza en mi garganta

que soy libre otra vez.

Tengo ganas de decirte...

Porque aún queda mucho que decir

entre los dos.

Tic tac, tic tac.


"Y duele, quererte tanto,
fingir que todo está perfecto
mientras duele
gastar la vida..."



(R. Arjona)

Día nuevo, vida nueva

Tengo ganas de escribir. No sé qué, quizás sólo en un afán de decir que sigo viva. Viva entre tanta mierda. Entre tanta cosa sin nombre, entre tanto nombre sin contenido. Entre tanta palabra vacía para aparentar que las cosas siguen teniendo sentido, y pasarnos la vida entre micro y micro corriendo porque vamos tarde a una reunión.

Así que tengo ganas de escribir. Palabras vacías otra vez. Que en el fondo sólo tratan de abrir un esqueleto por donde mañana puedan pasar los sueños que hoy se me cuelgan entre papeles rugosos.

Porque hoy, mal que mal, sigo viva, en el último 21 de octubre del 2009 de mi vida.

Bienvenida realidad. La que yo elijo vivir.

Esa realidad en que la polilla aleteando en mi ampolleta que desconcentra mi relato triste, es lo que vale la pena volver a mirar.

"There she goes

there she goes again..."

De - pender (o de - caer)

Pendo de tu alma como de la luna pende mi sueño
y es pender del silencio cuando se me arranca tu beso
y es pender de tu espalda cuando me rozas el ombligo

Pendo de tu historia
y es pender de un abrazo simple cuando termina el día

Me caigo en tu delirio
cada vez que se te ocurre no mirarme
me caigo en tu misterio
cada vez que se me cae tu recuerdo

Y soy de piel entera
cada vez que se te ocurre aparecer
y soy de sombra transparente
cuando me obligas a volver

No me pidas que me vaya
que ya me he quedado aquí para siempre
y si has de partir tú
que sea de una vez y a secas
que ya he caído un millón de veces
antes de verte deshacerme el pecho

Y depender de tu delirio
si se trata de parecer

de rozar tu boca incómoda
cuando me hablas de las máscaras

Es decaerme en un abrazo
con la absurda idea de que sea para siempre

aunque esta noche nos divida en dos
con tu palabra afilada colgando en mi teléfono

Pero no me obligues a caer
que las ganas locas que tengo de quererte
ya de eso mil historias bajo el brazo
pues has venido a ser todo lo que yo no puedo ser
No me obligues a caer en cuenta,
tarde pero siempre,
que fuiste aquel sueño inexistente
de que depender era lo correcto
con la excusa de un tal vez...

Encontrar - te

De un pasado lleno de miedos y huidas
donde se nos enseñó claramente a saber escondernos y, quizás,
a mentir
con máscaras, silencios y sueños por la ventana
de un mundo perfecto, pero irreal...

Venimos los dos

De mil historias entrecortadas

que siempre acababan en el mismo punto sin retorno

de un lucha cansada

por no saber dónde parar

De un viaje silencioso

sin ganas de volver

Venimos los dos

De las noches solitarias

buscando el camino a ninguna parte

perdidos entre el vaho de un futuro incierto

Hemos venido los dos

a encontrarnos aquí

En este presente esquivo y sublime

Sin ganas ya de escapar

Sin sueños resquebajados

ni tiempos de esperar

Hemos venido a sincronizar

en un instante

el infinito mundo del encuentro que nos contiene

y nos devela

en su más imperfecta salvedad

las ganas de volvernos locos

los dos

Me viste entre la gente

y te supe yo encontrar

y sólo eso debería bastar.

Coincidir

Vecina de mi mundo loco y desbordado
De mis noches vanas escribiendo sobre cómo cambiar el rumbo
De mis sueños mesiánicos de un tiempo más simple y transparente
De mis ganas de volar

Vecina de mis puntos sin retorno
De mis silencios meditabundos que no podía callar
Siempre a un lado de la línea de despegue
Inventando excusas para escapar

Algo de ponto se ha quedado en mi…

Un loco afán por encontrarte y no decirlo, quizás
Un espacio trémulo de búsqueda silente por tu espalda
Con eternas ganas de reposar ahí mi extremada búsqueda
Por un rato, hasta respirar otra vez.

Un loco afán por conocerte y sentirme en casa
Una mirada ingenua por tu boca que se me acurruca
Cada vez que me veo mirarte la sonrisa incrédula
por todo lo que ya no sé ocultar

Algo que de pronto se ha quedado en mi
En este encuentro transparente con tu beso extranjero
Y mis ganas de pedirte que regreses
Cada vez que se me acaban las excusas para no pensar en ti

Algo de pronto, en un coincidir,
en una noche calurosa de mil quinientos suspiros…
de pronto esta sorpresa de no querer escapar

Coincidencias de algodón dulce
Con tus ojos y los míos
Y su genuina confesión

Coincidencias de este encuentro
Que regresa al origen de una búsqueda común
con dirección a la próxima parada de tren…